viernes, 24 de octubre de 2008

segunda parte




marejadas humanizadas se me vienen a la cabeza atolondradas. es la cosa de la vivencia. es la cosa de la vivienda. es la cosa de las costumbres i es la cosa de las servidumbres. comere del salero para no salpicar los males, los desaturo i se hacen apequeñesimientos de no recuerdos, moralejas del inconsentimiento.

las caminatas me cansan, me canso de andar, mas no me canso de buscar, parece tener sentido si se va haciendo, parece que me canso de caminar por que no tengo activado el modo bipedotransportario, acomodo la raja i pareciera ser comodo aunqe me automotore para el traslado.

las gentes miraban, a veces me asusta la gente, otras me intriga sobre manera, otras quiziera qe no estuviesen con sus roteces, con sus desahogos. con sus borracheces. yo hoy me comi una sopaipa.

hoy anduve sola por una calle secreta, llege a la casa i me role una servilleta, por qe la angustiosidad no se me da los días de callá, no tendre ma soledad. andare por la vida de a par. (no olvidar la singularidad. se lo recomiendo al ambár) la vida ara lo demas i la crecimentacion sera incomparablemente mejor qe en singularidad.

ahora es hora de reposar, de conclusionar en modo elemental. de desconectarse de estos vicios, de volverse animal.

girar la cabeza i babiar

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